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{ARTÍCULOS DE OPINIÓN}

Un museo en llamas, la memoria y comenzar de cero

A veces, sólo a veces, le acompañaba la sensación de atravesar la galería principal de un museo mientras lo devoraban las llamas. Observa cómo los lienzos comprimían sus hilos de colores hasta transformarlos en recuerdos, desdibujando los relatos escritos a pincel a lo largo de los tiempos en un imposible puzle de ceniza. En mitad del pasillo, rodeado de obras maestras, tan sólo sentía impotencia y desolación. No era nadie; no era un superhéroe; tan sólo el espectador invitado a contemplar la destrucción de la condición humana desde butaca de patio. Sólo, no era nadie. Velázquez, Goya, El Greco, Magritte, Klint, Leonardo, Van Gogh, Dalí, El Bosco, Monet, Rembrandt, Picasso, Hopper, Warhol o Lichenstein. Todos sucumbían a la corpulencia del fuego. Los flamantes marcos de madera tallada, ya vacantes de empleo, escupían fulgores que jugaban a esquivarle en el último instante. Y era entonces cuando escuchaba la voz, siempre la misma voz, siempre el mismo mandato. “Puedes salvar uno, tú eliges”. Sospechaba qué la orden procedía de su propio ser. volátil e impalpable. Entonces, comenzaba la cuenta atrás. La hora de las decisiones; el momento de los valientes que nunca han tenido que serlo. Cuando las llamas brincan de tapiz en tapiz, de tela en tela, con la ambición y la diligencia de quien sustenta la razón y su corazón en el odio, no es posible escamotearse. Era consciente que torcer la mirada hacia otro lado cedía el paso a los miserables, a los dueños de las cerillas.  ¿Cuál eliges? ¿Cuál salvas? La ruleta de la elección acertada imposible giraba en una aceleración sostenida e inflexible. Las llamas surcaban la galería sirviendo a su paso los rescoldos de la imaginación y la creatividad. Era incapaz de hallar la respuesta correcta, la solución perfecta. Así que optaba por recordar para después contar. Siempre que le abordaba la sensación de hallarse en el pasillo de un museo en llamas, optaba por almacenar recuerdos e impresiones para después, comenzar de cero./Javi Muro.

 

 



Autor: Javier Muro

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