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El Aceite de oliva virgen extra riojano explora el mercado exterior

El catador profesional, Jorge Martínez, dedica su vida al aceite

Las producciones suelen ser de “alta calidad” pero su precio dificulta su comercialización en el mercado español. “El aceite de oliva virgen o virgen extra está en auge en cuanto a la mejora en el diseño del producto, pero no en su comercialización ni en los precios”. Jorge Martínez es catador profesional de aceite de oliva por la Universidad de Jaén y ha dedicado, y dedica, su vida al aceite, al buen aceite.  De hecho, creó una empresa de carácter familiar dedicada a servicios oleicos tras analizar y ver el desarrollo del sector en La Rioja y en Navarra, aunque sus tentáculos empresariales se extienden ya más allá de estas dos regiones.


Actualmente las empresas productoras de aceite trabajan con el punto de mira puesto en dos horizontes”, señala Martínez. Por un lado, algunas “buscan más calidad” sin tener tanto en cuenta el precio del producto final. Otras, “se esfuerzan más en la economía del producto”.


Hay que tener en cuenta que las marcas de aceite de oliva virgen extra que desde hace unos años han proliferado por todo el país “suelen salir en un segmento de precio medio-alto” con lo cual, es difícil competir con los grandes productores de Andalucía y Castilla la Mancha. Por el contrario, "son proyectos con un alto componente de ilusión" y con una apuesta muy firme por la calidad.


Toda esta pequeña explosión de nuevos productores de aceite de oliva ha generado también que la sociedad conozca más este producto y se acerque a él con otros ojos. “Pero queda mucho, incluso dentro del sector, de los propios agricultores y y de los propios almazareros. Se desconocen las diferencias. Hace poco –continúa Martínez- estuve en el salón Gourmet y pude comprobar que se sigue comercializando sin base. Muchos no saben ni qué es la acidez, algo básico”.


A su juicio, en La Rioja se está trabajando bien, fundamentalmente en dos líneas. Por un lado, se elabora un aceite de oliva virgen extra “de alta calidad, dirigido a un mercado gourmet y en pequeño envase, pero por su precio la comercialización se dirige a la exportación”. Por otro lado, existe otro aceite de oliva también virgen extra “más económico y con muy buena aceptación presentado en envase grande (5 litros) de mucha calidad pero sin llegar al primero”. De hecho, hay varias marcas de aceite de oliva virgen extra de La Rioja que han sido galardonadas en diferentes certámenes. Será que el camino emprendido es bueno. Autor/Roberto de Miguel

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